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Jardines Zen
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Un jardín japonés en casa
Muchos de nosotros tenemos el deseo de tener un jardín en casa. Hoy en día hacer realidad esto puede ser sumamente sencillo. No importa si se trata de una terraza pequeña, o de una extensión grande de patio, un jardín zen puede ser del tamaño que lo necesites.
Un jardín zen aporta paz y tranquilidad, y en concreto, los jardines zen mejoran el feng shui de una casa, que es una sistema para organizar de manera armónica los espacios. Para el feng shui, el orden de cada uno de los elementos marcará el equilibro natural del espacio, es por ello que debemos pensar de qué manera está distribuido nuestro espacio apara así saber qué elementos debemos colocar en cada sitio.
Consigue armonía
con un jardín zen
Normalmente quien decora su jardín al estilo feng shui, tendrá otros elementos dentro del hogar colocados bajo esta tendencia, ya que la idea de esta filosofía es equilibrar las energías de los espacios, y para lograr este cometido, la coherencia entre los elementos debe existir.
Sin embargo, existen personas que pese a tener una decoración interior del hogar más minimalista, o diferente, buscan tener un área de paz y tranquilidad en la vivienda y buscan optar por esta opción ¡Es posible! Lo indispensable es conocer los puntos que deben tenerse en cuenta para crear un jardin zen.
En que consiste un jardín zen o karesansui
Lo primero que debe conseguirse en la decoración de estos jardines es la armonía. Los espacios deben estar abiertos a las corrientes de ánimo y los obstáculos deben evitarse ya que impedirán que fluya de manera natural las energías.
Otro valor será el orden. La distribución de cada una de las piezas debe ser siempre de manera intencional, buscando marcar zonas, creando espacios, y considerando, que debe ser un lugar que invite a entrar al mismo. Es por ello, que uno de los elementos más usados para esta decoración de pequeños jardines son las rocas.
Con piedras podemos crear caminos, colocar vallas, crear fuentes, o colocarlas como elemento para dividir espacios. Son una excelente opción que no puede faltar.
Conjuntamente con las rocas, otro elementos que es fundamental para el decorado de jardines japoneses o al estilo feng shui, es el agua. El agua es sinónimo de pureza, es vida, pero además de ello, el sonido que el emite el agua es uno de los sonidos más relajantes que existen.
El agua en movimiento además, significa abundancia, por lo cual, un punto a tomar en consideración es que la misma debe fluir, a través de elementos decorativos como fuentes. Las fuentes o estanques japoneses son un toque decorativo magnifico para estos espacios.
Un jardín zen para relajarse y pensar
El significado textual de la palabra karesansui es “jardín seco de montañas y agua”. Esto es debido a que la arena o bien grava representa el agua, y las piedras las montañas.
Son jardines escenográficos, y de dimensiones delimitadas (como máximo diez por treinta metros). La arena se rastrilla con diferentes dibujos que cambian desde líneas rectas, ondas, zig zags a círculos concéntricos. La predisposición básica es rodear las piedras que sobresalen con anillos, representando las ondulaciones en el agua y en el resto del jardín, rastrillarlo paralelamente a la plataforma.
- Talla de rocas: Ahora se deja introducir piedras talladas en los jardines secos (ya antes eran solo piedras naturales).
- O bien-karikomi: práctica consistente en recortar árboles y plantas dándole formas. Se recortan en setos temas como El navío del tesoro o bien La isla Horai.
En el siglo veinte, arquitectos como Shigemori Mirei prosiguieron efectuando jardines Karesansui en templos Zen.
Jardines Zen, creados como lugares de meditación y concentración hace más de 2000 años
Los jardines Zen están formados por diferentes elementos naturales (eminentemente arena fina, piedras pulimentadas, más tarde se les agrega figuras de piedra, madera, estancos de agua, y bonsáis o bien arboles afines de forma sabia puestos con la intención de completar el espacio creado de paz y armonía. Son jardines sin flora o bien paisajes secos (kare-sansui) en los que la arena cubre toda la superficie del jardín tal y como si fuera un mar en calma.
La falta de cualquier riqueza material y su composición, a base de elementos muy simples, es el perfecto reflejo de la filosofía Zen, que predica máxima parquedad y sobriedad. Están pensados para inspirar vitalidad, serenidad y favorecer la meditación (en sanscrito, Zen significa meditación).
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